Me parece repudiable las acciones que un grupo de padres y madres están efectuando en protesta por las demoras en la entrega de insumos de un proyecto del programa de empleos de la comuna de Talcahuano. Estos individuos han empleado como medida de presión la huelga de hambre de sus hijos, entre ellos seis guaguas.
Señalan (los padres) que no los han obligado, sino que ellos voluntariamente se han sumado a la protesta. Si fuese así, ¿deberíamos bajar la edad imputable de los menores a 1 año?, me parece que sí. Si estos padres nos indican que son capaces comprender las razones de protesta, que comprenden la presión que significa una huelga, claramente la educación que se imparte en las salas cunas está mal enfocada, deberían enseñar ramos que potencien las prematuras habilidades de estos menores.
En este caso, por suerte hay un recurso de protección que cataloga de ilegítima esta forma de protesta ya que los hijos no son de propiedad de los padres, éstos deben respetar los derechos de estos pequeños chilenos, en caso contrario ya se ha declarado la intención del servicio nacional de menores en entregar la tutela de estos menores a gente con un poco más de criterio.