Dicen que los cambios son siempre buenos, esperemos que sea así. Cuando se ha vivido una etapa y hemos llegado al fin de ésta debemos para un momento y pensar en lo vivido, tanto bueno como malo. Debemos sacar cuentas y finalmente decidir qué podemos rescatar de ella.
Ahora solo queda esperar para determinar el inicio de una nueva etapa que esperamos sea fructífera y agradable.